Las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) se están abriendo paso en nuestro quehacer educativo bien porque la nueva ley impone dicha inclusión bien porque forman parte cotidiana de la sociedad que nos ha tocado vivir. Cómo enfrentarse a ellas varía tanto como personas existen a nuestro alrededor: Hay quienes huyen de esta realidad delegando en otros, hay quienes lo intentan y hay quienes lo consiguen.
Puede que sea difícil enfrentarse a este mundo nuevo, tal y como nuestros abuelos se enfrentaron a los primeros televisores en blanco y negro con uno o dos canales… pero si ellos pudieron ¿por qué no integrarlo en nuestra propia educación? Para nosotros que vivimos la era TDT donde lo normal es el plasma, el color y veinte canales, y que contamos también con el ordenador que es, además, la nueva y mejorada máquina de escribir, el nuevo teléfono con cámara, la carta sin sello y el telegrama en vivo, nos toca enfrentarnos a esta materia nueva y cambiante para poder enseñarla y, por qué no, aprovechar sus múltiples ventajas para mejorar nuestra manera de hacerlo.
A las TIC las definen como un conjunto de servicios, redes, software y dispositivos que tienen como fin (…) almacenar, procesar y difundir todo tipo de información, telemática, etc. con diferentes finalidades (formación educativa, organización y gestión empresarial, toma de decisiones en general, etc.)*. A nosotros nos corresponde integrarlas en nuestras prácticas docentes a la vez que las enseñamos y de esta forma el alumnado se va dando cuenta de la utilidad que pueden tener. Si alguien necesitara hacer una presentación seguro que recurriría a una pizarra, algunos a un proyector,… objetos que hemos visto utilizar para ese fin. Nunca podríamos pensar en algo que no hayamos visto. Por ello, si el alumnado nos ve utilizarlas, ya tiene parte de su aprendizaje conseguido, simplemente con la observación. Por otro lado, si usamos estas tecnologías para la búsqueda de informaciones atractivas para el alumnado, es más, si les hacemos partícipes de esa búsqueda, el aprendizaje será más fluido, permanente y enriquecedor.
Cada cual busca la manera de enfrentarse a las TIC. Mi opción fue y sigue siendo investigar por cuenta propia, realizando algunos cursos: Que hay blog, me hago uno para ver como funciona; que hay Grupos, me integro en alguno y posteriormente lo creo; que los correos electrónicos cambian dando opciones, las examino y las que me gusten las añado; que dispongo de una pizarra digital, intento sacarle partido creando actividades propias de mi nivel y buscándolas por la red; que me enseñan un programa para hacer películas con fotos, seguro que hay más e investigo; que hay un curso que me puede ayudar en algún aspecto de la informática, voy y me apunto… Creo que lo importante es quitarle el miedo al ordenador. No se rompe tan fácilmente (si tienes antivirus) y en caso de que se haga algo de lo que no se sabe salir, siempre habrá alguien que te pueda ayudar (un amigo, un compañero o un técnico) que te enseñará que hiciste mal y cómo solucionarlo si vuelve a pasar. Mis amigos me enseñaron que cuando alguien no puede, se le ayuda que ya el favor lo devolverá cuando ayude a otro en igual situación, creando una cadena de solidaridad fructífera en una sociedad egoísta. Yo no me considero, ni mucho menos, una experta en el tema, soy una usuaria más de este mundillo, pero con mis ensayos y errores me enseñaron truquillos con los que intento ayudar.
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