martes, 21 de octubre de 2008

¡Mejor no me hubiera levantado hoy de la cama!



"¡Mejor no me hubiera levantado hoy de la cama!" Que frase tan usada pero que ayuda a desahogar...
Hoy, aunque podría ser cualquier otro día, nos levantamos y comenzamos las tareas rutinarias ,porque no nos queda otra, mientras piensas que el día se ha confabulado en contra de uno, pues todo sale mal.
Según avanza la mañana, las cosas comienzan a cuadrar pero al terminar la jornada, justo al final, ¡se fastidia otra vez!, como diciéndonos "que todavía te puedo fastidiar, no lo olvides".
Y cuando ya piensas que ya no puede pasar nada malo, va y se termina de estropear la tarde-noche, como para dejarnos ese sabor amargo en la boca para irnos a la cama...

Puede que tú, como yo, tengas un día de estos. Puede que, a tu lado, hoy estuviera un compañero amargado, como yo, porque a cada paso todo le iba saliendo mal.

Pero... ¿qué pasa conmigo? Los días no pueden influir de esa manera en las conductas,... ¿los días? Ellos no. Somos nosotros, y nuestro entorno, nuestra predisposición quizá también, a vernos afectados por circunstancias que no son más que eso, CIRCUNSTANCIAS. Nuestra actitud frente a ellas es lo que nos puede salvar el día. ¿Por qué ver lo negativo? ¿por qué no fijarnos en lo positivo? Además, ¿por qué decirlo en plural? Cada cual debe mirar su paja, yo debo encargarme de mi viga.
Por desgracia, ya el día termina y no hay mucho que pueda arreglar, pero mañana, o el día que fuere, si pienso que va a tratarse de otro mal día, recapacitaré y diré: "¡Mejor no me hubiera levantado hoy de la cama!" ;-)

1 comentario:

José Alberto dijo...

Me encantó tu reflexión, es cierto, todo depende de como veamos nosotros el mundo. Quizás, la clave para mejorar las relaciones humanas, comienza por reeducar nuestra visión los acontecimientos de nuestra vida.
Personalmente, acontecimientos que consideré como malos en su momento, fueron decisivos y enriquecedores para configurar mi vida presente.
Ánimo Isa que todo pasa, como dice Serrat.